Oaxaca es un destino mágico que invita a la exploración y la conexión. Si viajas solo, este itinerario de 5 días en Oaxaca te brindará la oportunidad de sumergirte en la cultura, la gastronomía y la hospitalidad de su gente. En cada rincón de esta ciudad, encontrarás una historia por contar y una aventura por vivir. ¿Listo para dejarte llevar por la alegría de descubrir lo desconocido? Comencemos.
Día 1
Tu aventura en Oaxaca comienza por el corazón de la ciudad: el Zócalo. A primera hora, disfruta de un café en alguna de las cafeterías locales mientras observas cómo despierta la vida en la plaza. Luego, dirígete a la Catedral Metropolitana de Oaxaca, una joya arquitectónica que te dejará sin aliento.
Después de un recorrido por la catedral, visita el Mercado 20 de Noviembre. Aquí, te recomiendo probar un tlayuda, una tortilla grande y crujiente con frijoles, quesillo y tu elección de carne. No olvides acompañarlo de un clásico mezcal, el alma de Oaxaca.
En la tarde, pasea por las calles adoquinadas del centro histórico. Visita la Biblioteca de San Agustín y el Museo de las Culturas de Oaxaca, donde podrás conocer más sobre la rica historia de esta región. Antes de terminar el día, asiste a una representación de danza tradicional en el Teatro Macedonio Alcalá. La energía y el ritmo te envolverán, creando la perfecta introducción a la cultura oaxaqueña.
Día 2
Este día es ideal para explorar las zonas arqueológicas de Monte Albán. Alquilar un taxi o un transporte colectivo es una buena opción si viajas solo, ya que te permitirá llegar sin complicaciones. Las impresionantes vistas desde este antiguo asentamiento zapoteca son dignas de ser inmortalizadas en tu cámara.
Después de explorar las ruinas, regresa a la ciudad y descubre uno de los mercados más emblemáticos: el Mercado de Abastos. Aquí, la variedad de frutas, especias y productos locales te sorprenderá. Te recomiendo que pruebes un delicioso mole negro, tradición oaxaqueña que no te puedes perder.
Por la noche, dirígete al barrio de Jalatlaco, conocido por sus hermosas calles empedradas y sus coloridas casas. Disfruta de una cena en uno de sus restaurantes locales, sumergiéndote en la calidez de la hospitalidad oaxaqueña.
Día 3
Hoy es un buen día para hacer una excursión a Hierve el Agua. Este impresionante sitio natural cuenta con cascadas petrificadas y piscinas naturales. Si viajas solo, puedes unirte a un tour que te lleve todo el día. No olvides llevar tu traje de baño y disfrutar de un refrescante baño en estas aguas minerales.
Al regresar a la ciudad, visita el Taller de Alebrijes, donde podrás ver cómo se crean estas coloridas figuras de madera. Incluso puedes participar en un pequeño taller y llevarte un recuerdo único de tu viaje.
Para cenar, prueba un platillo de chapulines (saltamontes) en un restaurante local. ¡Atrévete a experimentar nuevos sabores y texturas!
Día 4
Dedica este día a explorar los pueblos que rodean Oaxaca. Comienza en Teotitlán del Valle, famoso por sus tapices y textiles. Puedes visitar talleres locales y aprender sobre las técnicas de tejido tradicionales. No olvides interactuar con los artesanos, quienes estarán encantados de compartir su historia contigo.
La siguiente parada será en Tlacolula de Matamoros, donde tendrás la oportunidad de visitar su fascinante mercado dominical. Aquí, la diversidad de productos y perfumes locales te cautivarán. Aprovecha para almorzar algún platillo típico, como los tamales oaxaqueños.
Regresa a la ciudad y, si tienes energía, visita la Casa de la Ciudad, un espacio cultural donde a menudo se realizan exposiciones y actividades artísticas. Es un lugar perfecto para sumergirte en la vida cultural contemporánea de Oaxaca.
Día 5
Para tu último día en Oaxaca, empieza con una visita al Museo Rufino Tamayo, que alberga una impresionante colección de arte prehispánico. Luego, date un paseo por el Jardín Etnobotánico, donde puedes aprender sobre la flora de la región y su importancia cultural.
Antes de despedirte, asegúrate de comprar algunos recuerdos en el Mercado de Artesanías, donde encontrarás desde cerámicas hasta piezas de arte popular. Dedica un tiempo para charlar con los vendedores, y quizás encontrarás alguien con quien compartir una historia o dos.
Con tu corazón lleno de nuevas experiencias y recuerdos inolvidables, termina el día con una cena en un restaurante con vista al Zócalo, reflexionando sobre tu viaje y sintiendo la gratitud por el tiempo que has pasado aquí.
Consejos para viajar solo en Oaxaca
Viajar solo puede ser una experiencia enriquecedora si tomas algunas precauciones y consejos en cuenta:
- Transporte: Utiliza taxis autorizados o aplicaciones de transporte para moverte por la ciudad. Informarte sobre las tarifas y rutas también te ayudará a evitar sorpresas.
- Seguridad: Mantén tus pertenencias cerca y evita mostrar objetos de valor en lugares concurridos. La mayoría de las áreas turísticas son seguras, pero siempre es bueno estar alerta.
- Socializar: Interactúa con otros viajeros y locales. No dudes en preguntar sobre recomendaciones o compartir tu historia. Los oaxaqueños son amigables y siempre están dispuestos a ayudar.
- Exploración: No te limites a los lugares turísticos. Pasea y descubre pequeños cafés, tiendas de artesanías y rincones donde puedas conectar con la vida diaria de la ciudad.
Si eres nuevo en esto de viajar solo, asegúrate de revisar nuestro Checklist para viajar solo por primera vez y la Guía completa para viajar solo. Además, no olvides leer sobre Cómo superar la soledad viajando.
Reflexión final
Oaxaca es un destino que enriquece el alma y ofrece una mezcla de tradición y modernidad que siempre deja huella en el corazón de quienes lo visitan. Al viajar solo, te das la oportunidad de conocer no solo el lugar, sino también a ti mismo. Permítete perderte en las calles de esta bella ciudad, descubre su esencia y vuelve con recuerdos que atesorarás por siempre. ¡Es hora de emprender esta aventura con confianza y libertad!